La exgobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, se encuentra cada vez más complicada. La nueva causa judicial que se suma a la investigación por la ‘Gestapo’, es impulsada por la fiscal Ana Miriam Russo quien está a cargo del Juzgado Federal N° 3 de La Plata. Así, se dio inició a la acción penal por espionaje ilegal y persecución judicial tras la denuncia de Alberto Pérez, exjefe de Gabinete de Daniel Scioli, indicaron desde C5N.

La denuncia e investigación también alcanzará a otros funcionarios de la gestión macrista en la provincia de Buenos Aires. Pérez denunció que la Gestapo también lo había perseguido y aportó material probatorio. De esta manera, otra causa judicial se abre contra la exgobernadora. En este caso, la fiscal pidió la declaración testimonial del subcomisario Hernán Casassa.

El pedido de la testimonial se enmarca en la filtración de los audios de Casassa donde relató cómo se diagramaban las causas judiciales contra opositores con la participación del procurador bonaerense Julio Conte Grand y cómo se iniciaban causas que iban a los medios de comunicación. Luego, desencadenaba en allanamientos y detenciones de dirigentes opositores.

A mediados de enero, Pérez denunció que le “armaron un carpetazo”. En ese sentido, afirmó que tras la salida de la gestión de Scioli en la provincia de Buenos Aires allanaron su casa. “Decían que el último mes de nuestro gobierno, en diciembre de 2015 nos habíamos llevado del Banco Provincia 20 mil millones. Eran el pago de la nómina salarial, de los empleados públicos de la provincia de Buenos Aires”, narró en C5N.

También relató que le iniciaron otra causa porque “decían que tres meses antes de irnos, habíamos hecho un giro de 800 millones de dólares a un banco de Nueva York”. Al respecto, Pérez manifestó que se trataba del pago de un bono vencido. También realizaron una denuncia contra su gestión en base a “una bolsa en la calle con facturas” ligadas a la exgestión kirchnerista.

C5N / HORACERO